¿Qué tiene que tener un barrio para que sea el más moderno de una ciudad? ¿Qué hace que sea el centro de atención del movimiento cultural? Los barrios han tomado una importancia nunca vista desde la pandemia. Muchos redescubrieron el suyo al no tener otro lugar donde hacer la compra o pasear. El sentido de comunidad ha aumentado y las calles alrededor de nuestra casa han cobrado un valor diferente.
Algunos destacan por su arquitectura, por calles anchas, con espacios verdes; otros, por su historia, con edificios y comercios centenarios. Y hay barrios que engloban los nuevos movimientos que mantienen viva la ciudad. Teniendo esto en cuenta, ¿cuál dirías que son hoy los barrios más ‘cool’ del mundo?
La revista TimeOut se ha hecho la misma pregunta y cada año elabora un ranking con 40 barrios después de encuestar a unos 38.000 usuarios, entre personas anónimas y expertos de la publicación. Este año el primer puesto se queda en España, exactamente en L’Esquerra de l’Eixample (Barcelona). Le acompañan en el podio Downtown (Los Ángeles) y Sham Shui Po (Hong Kong).
El barrio más ‘cool’ del mundo está en Barcelona
Del barrio barcelonés destaca su estructura y sus calles en cuadrícula. Cada bloque de pisos tiene su patio interior, una razón de peso este 2020 marcado por los confinamientos, que nos ha hecho ver la necesidad de tener terrazas, patios y espacios abiertos. Si hablamos de arquitectura, son característicos de este área los espacios comunitarios como la Fábrica Lehmann —un antiguo edificio reconvertido donde conviven diferentes proyectos empresariales—, el huerto urbano de l’Espai Germanetes, el mercado del Ninot y el parque Joan Miró. Una mezcla que surge de saber readaptar lo que ya existía a las necesidades de los vecinos de hoy sin hacer que pierda su esencia.


Además, el barrio volverá a sufrir una transformación en un futuro próximo, o eso es lo que quiere el Ayuntamiento. Aquí tienen pensado implantar las llamadas ‘supermanzanas’, es decir, que los coches solo puedan circular por ciertas calles exteriores de la zona para darle más presencia al peatón y dotar a los vecinos de más espacios verdes.
El barrio ‘cool’ de Madrid
En el puesto 21 de las 40 ciudades más ‘cool’ también aparece Lavapiés (Madrid). En esta edición destaca por su solidaridad en tiempos de coronavirus, ayudando a la población más desfavorecida y golpeada por la crisis; hace dos años fue alzada al primer puesto por su vida multicultural y esa mezcla entre lo moderno y lo castizo. Sus calles estrechas y numerosas plazas hacen que se respire una esencia de barrio que nos retrotrae a otra época. Pero, en algunos de sus rincones, también aparecen símbolos de las nuevas generaciones como la autogestionada Tabacalera, un lugar donde se reúnen nuevos artistas y cuyas paredes siempre están actualizadas con ‘graffitis’ nuevos.


También destaca la sede de la UNED, ubicada en las Escuelas Pías, una antigua iglesia que hoy acoge a los estudiantes en una de las bibliotecas más impresionantes de España. O el cine Doré, la actual sede de la Filmoteca Española, un edificio modernista de principios del XX que poco tiene que ver con la Corrala de Tribulete, construida en 1872 y restaurada en 1979. Es esta mezcla arquitectónica la que permite sobrevivir a un barrio que nunca deja de ser considerado uno de los más castizos de Madrid.
Canbayal, el más ‘cool’ de Europa
El periódico británico ‘The Guardian’ hizo a principios de año su propia lista de barrios más ‘cool’ de Europa y también en el número uno aparecía uno español: el barrio del Cabanyal, en Valencia. El periodista Nick Inman, que firmó la reseña, destaca que pese a que hay un ambiente cosmopolita “se está conservando la personalidad tradicional del barrio”.
A principios de los 2000 estuvo a punto de ser reconvertido. El plan del ayuntamiento era construir una gran avenida, haciendo desaparecer más de 1.000 viviendas “muchas de ellas decoradas con originales cerámicas de ‘art nouveau’”, destaca el periodista. “Fue clasificado como una área de importancia cultural, pero el distrito estaba, no obstante, amenazado con expropiaciones forzosas y destrucción, hasta que las protestas de activistas locales finalmente bloquearon el plan en los tribunales”, relata Inman.

